La pérdida de hueso dental o alveolar puede estar provocada por diferentes patologías y asimismo puede provocar múltiples problemas buco-dentales. Esta pérdida de hueso dental no solo puede provocar problemas de oclusión, movimientos dentales, bruxismo y patología o alteración de la ATM,… Sino que asimismo puede dificultar el tratamiento de rehabilitación maxilar cuando se quiere colocar implantes dentales.

Personas de todas las edades se ven afectadas por la pérdida de dientes. Además de perder los dientes con el tiempo, se pierde hueso maxilar siendo necesario técnicas de regeneración ósea para poder colocar un implante dental en nuestra clínica.
En este artículo te explicaremos que origina la pérdida de hueso maxilar y asimismo qué tratamientos pueden evitar esta.
¿Qué es el hueso alveolar?
Empezamos hablándote del hueso alveolar que es la estructura ósea donde está integrada la raíz dental o de un diente. Este hueso alveolar forma parte del todo que es la estructura maxilar.
Cada pieza dental está colocada, en el maxilar, en un espacio llamado alvéolo y el interior del hueso está compuesto por pequeñas perforaciones que contienen los vasos sanguíneos. Este hueso tiene como principal diferencia al resto de las estructuras óseas del cuerpo humano a que, a lo largo de la vida, este puede cambiar.
Es decir, el hueso alveolar, puede renovarse y curarse por mecanismo naturales. Sus principales funciones son las de mantener las piezas dentales insertadas en el maxilar y la de respuesta a la presión durante la masticación.
No obstante cuando perdemos uno o varios dientes el hueso alveolar empezará a re-absorberse o perderse. Es conocido que a los tres años de una pérdida dental el hueso alveolar de la zona en cuestión podrá llegar a perder hasta un 60% de su altura y grosor. Ello podrá provocar diferentes problemas que te detallaremos más adelante.
¿Qué provoca la pérdida de hueso dental?
La pérdida o re-absorción ósea a menudo, en su fase inicial, puede ser difícil de identificar. De ahí la importancia de los controles o revisiones clínicas periódicas con nuestro dentista que nos permitirán identificar y tratar con celeridad este problema.
Mediante una radiografía panorámica o una OPG el dentista es capaz de identificar si hay o no una pérdida o re-absorción ósea y asimismo, trazar su tratamiento. Será capital que se conozcan las causas que han provocado esta pérdida ósea para poder actuar. Las principales causas que pueden provocar la pérdida del hueso maxilar son:
- Las extracciones dentales complejas, la periodontitis (piorrea) y el uso de dentaduras.
- Cuando el paciente pierde todos los dientes maxilares se empieza a producir una reabsorción severa que lleva a la falta de hueso para la colocación de implantes dentales.
- La periodontitis lleva a la perdida de encía y hueso de soporte de los dientes que van quedando descarnados hasta que se empieza a mover y caen originando una atrofia maxilar.
- Las dentaduras de quita y pon suponen también un factor de riesgo por traumatizar un hueso que además no trabaja y acaba por desaparecer.
Pérdida o extracción de dientes
Cuando se extrae o nos falta un diente y este no es sustituido por un implante dental, el hueso alveolar/maxilar dejará de recibir los estímulos procedentes de la masticación. Esta situación provocará la pérdida ósea o la re-absorción ósea que no solo afectará estrictamente al espacio del diente ausente o perdido, sino que asimismo afectará a los dientes adyacentes.
Asimismo, la ausencia de un diente afectará a su diente antagonista que podrá extraerse con el paso del tiempo. Como ves, la sola pérdida o ausencia de un diente pueden alterar tu salud oral y tu armonía buco-dental.
Pérdida de hueso alveolar por traumatismos o golpes
Después de recibir un traumatismo o un fuerte golpe en un diente se puede detener la estimulación que este trasmite al hueso alveolar/maxilar. Ello podrá provocar irremediablemente una pérdida de hueso alrededor de esta pieza dental contusionada.
Por ello es de suma importancia que tras recibir un golpe en un diente se acude inmediatamente a una consulta dental y asimismo, se realicen revisiones periódicas.
Periodontitis y pérdida de hueso en los dientes
Las patologías periodontales, es decir, la gingivitis y la periodontitis o piorrea están provocadas por la placa bacteriana generalmente acumulada sobre las superficies dentales por unos deficientes hábitos de higiene.
En el caso de la periodontitis o piorrea, la placa bacteriana se localizará por debajo de la encía (nivel sub-gingival) lo que provocará un deterioro de las estructuras que sustentan a los dientes. Entre estas estructuras está el hueso alveolar que podrá re-absorberse por la presencia de la placa bacteriana o sarro.
Asimismo, la periodontitis podrá provocar la movilidad y pérdida de hueso en los dientes así como la pérdida prematura de los dientes. Para prevenir las patologías periodontales será clave mantener unos correctos hábitos de higiene y realizar al menos una vez al año una higiene dental o tartrectomía.
Osteoporosis
Las personas que padecen esta patología, la osteoporosis, serán más susceptibles a padecer una re-absorción o pérdida del hueso maxilar. Ello se debe a que sufren una alteración en el equilibrio entre el fósforo y el calcio provocando una disminución en la densidad ósea en todo el cuerpo.
Pérdida de hueso maxilar por usar prótesis de quita y pon
Las prótesis removibles o “de quita y pon” que son muco-soportadas (se apoyan sobre la encía o mucosa oral) no proporcionan ningún tipo de estimulación al hueso maxilar.
Ello provocará la reabsorción del mismo y la pérdida de hueso maxilar y esta es la causa por la que las prótesis re-movibles con el paso del tiempo pueden adquirir movilidad. Las prótesis removibles de quita y pon se deberán readaptar en el paso del tiempo para permitir comer y hablar con normalidad y evitar rozaduras y molestias.